La ONU al frente de la regulación de la IA: Un compromiso con la seguridad y la equidad global
La Asamblea General de la ONU ha marcado un hito al solicitar la creación de normativas internacionales para la inteligencia artificial (IA), reconociendo tanto su potencial como los riesgos que conlleva. Esta iniciativa, liderada por Estados Unidos y apoyada por numerosos países, excluye explícitamente la IA militar pero enfatiza la importancia de establecer sistemas de IA seguros y confiables. El enfoque de la ONU se centra en promover el desarrollo digital y garantizar un acceso equitativo a los beneficios de la IA, alineándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030. Se plantea la creación de un organismo dedicado a regular los riesgos asociados a la IA, reflejando la preocupación global por los desafíos existenciales que representa. El documento resalta las amenazas de tecnologías malintencionadas, como la manipulación de la opinión pública y la vulneración de la privacidad. La explosión de ChatGPT en 2022 ejemplifica el doble filo de la IA: su capacidad para innovar y, a la vez, sus riesgos para la democracia y los derechos humanos. La resolución insta a la comunidad internacional a cesar el uso de sistemas de IA que contravengan los derechos humanos o supongan riesgos significativos. Simultáneamente, destaca los beneficios potenciales de la IA en la reducción de la brecha digital y el avance hacia un futuro más equitativo. Este esfuerzo refleja una conciencia de los “sesgos” inherentes a tecnologías desarrolladas predominantemente por hombres, subrayando la necesidad de inclusión de las mujeres en la planificación y desarrollo de la IA. La iniciativa de la ONU sugiere una estrategia de Estados Unidos para liderar en la regulación de la IA, anticipándose a una “carrera” global por establecer marcos normativos. Este movimiento, junto con las acciones previas de la Casa Blanca, indica un paso decisivo hacia una gobernanza efectiva de las tecnologías emergentes, asegurando que la IA sirva al bienestar colectivo sin comprometer los derechos fundamentales. Información extraída del artículo original publicado en El Periódico. . . . .