- IA y machismo: un problema creciente
- Cómo la IA perpetúa los sesgos de género
- Desafíos de género en la inteligencia artificial
Expertos señalan que el problema reside en el diseño de la herramienta, el control de los datos y la información de origen, que refleja prejuicios sobre hombres y mujeres. En el vídeo, Lorena Jaume-Palasí, Francisco Sierra y Thais Ruiz analizan cómo la IA no solo refleja, sino que amplifica el machismo existente en la sociedad.
Hace poco más de dos meses, Mediaset puso al frente de uno de sus programas a una presentadora virtual creada con Inteligencia Artificial (IA). Algunos lo criticaron porque no era humana, y otros porque era guapa, joven y casi perfecta. Este caso reabrió el debate sobre por qué no era una mujer mayor o un hombre. Según los expertos, la IA no solo refleja el machismo propio de la sociedad sino que lo amplifica. Lorena Jaume-Palasí, fundadora de Ethical Tech Society, Francisco Sierra de la Asociación de Prensa de Madrid (APM) y Thais Ruiz, fundadora y directora de Digital Fems, analizan cómo la inteligencia artificial acentúa los sesgos de género.
El problema radica en el diseño de la IA, el control de los datos y la información de origen, que a menudo refleja prejuicios sobre hombres y mujeres. Esto se debe a que los algoritmos de IA aprenden de grandes cantidades de datos generados por humanos, que pueden contener sesgos implícitos. Estos sesgos se trasladan a las decisiones que toma la IA, perpetuando y amplificando los estereotipos de género existentes. La creación de una presentadora virtual joven y atractiva en lugar de un modelo más diverso es un ejemplo de cómo la IA puede reforzar los roles de género tradicionales.
Lorena Jaume-Palasí destaca que los sesgos en la IA pueden tener consecuencias graves, desde la discriminación en procesos de selección de personal hasta la perpetuación de estereotipos en la publicidad y los medios. Thais Ruiz subraya la importancia de la diversidad en los equipos que desarrollan tecnologías de IA para mitigar estos problemas. Francisco Sierra añade que es crucial establecer regulaciones y directrices éticas para garantizar que la IA se utilice de manera justa e inclusiva.
El vídeo de El País muestra cómo la inteligencia artificial no solo refleja los sesgos de género de nuestra sociedad, sino que los amplifica, subrayando la necesidad de abordar estos problemas desde el diseño y la implementación de tecnologías más equitativas.
Noticia elaborada a partir del artículo original publicado en El País.